En el encantador pueblo de Sant Feliu de Guíxols, Girona, se encuentra un lugar que no te puedes perder: Maison Marcel. Ubicada en la C/ Major, 5, esta pastelería es un auténtico paraíso para los amantes de los dulces y el café de calidad.
Un rincón acogedor en Sant Feliu de Guíxols
Desde el momento en que pones un pie en Maison Marcel, te sentirás como en casa. El local es una mezcla perfecta de elegancia y sencillez, con una atmósfera que invita a relajarse y disfrutar. Andrea, la dueña, junto a su equipo, te recibirá con una amabilidad que te hará sentir como si estuvieras visitando a un viejo amigo.
Productos caseros y de calidad
Lo que realmente distingue a Maison Marcel son sus productos. Todos son caseros y están elaborados con mucho amor y dedicación. Desde los pasteles más originales hasta los helados y la bollería, cada bocado es una experiencia deliciosa. No te puedes perder el croissant con chocolate y crema, divino y perfecto para acompañar con un chai latte.
Y si eres amante del café, te llevarás una grata sorpresa. Incluso los italianos han quedado encantados con la calidad del café en Maison Marcel. ¡Eso ya dice mucho!
Un servicio impecable
El servicio en Maison Marcel es rápido, de calidad y lleno de amabilidad. Puedes optar por disfrutar de tus dulces en la encantadora terraza o en el interior del local. Ofrecen opciones para todos los gustos: compra en tienda, para llevar, entrega a domicilio y entrega el mismo día. ¡Así que no hay excusas para no deleitarse con sus maravillas culinarias!
¿Te preocupa el aparcamiento? No te preocupes, aunque el local no cuenta con un parking propio, a solo tres calles se encuentra el parking del mercado, que ofrece media hora gratuita.
Recomendaciones imperdibles
Si estás en la zona, no puedes dejar de probar su helado de chocolate con cacao de Ecuador y Perú. Es una auténtica delicia que no olvidarás. También, la versión de coca de Sant Joan es increíblemente buena y original. Y para los que vienen de más lejos, como desde Barcelona, vale totalmente la pena el viaje.
Así que, la próxima vez que estés en Sant Feliu de Guíxols, asegúrate de hacer una parada en este encantador lugar. ¡Te prometemos que no te arrepentirás!